El miedo es la razón por la cual muchos dejamos a medias nuestros proyectos o ni siquiera empezamos, pero aquí te contaré un par de trucos para superarlo.

Primero entendamos que el miedo es una emoción primitiva en nuestro cerebro y hace miles de años era muy necesario para sobrevivir y que aún nos sirve para lo mismo, solo que hoy en día nos dejamos dominar de él.
El miedo nos sirve para correr ante el peligro, para no tirarnos de un piso 20, para reaccionar ante quien nos haga mal, pero también nos paraliza para iniciar o terminar nuestros proyectos y justo ahí está lo grave de este asunto.
El miedo puede destruir nuestra psicología e inmovilizarnos para que no actuemos, hemos sentido miedo al rechazo, miedo al fracaso, miedo al éxito por no creernos capaces de manejar la presión y sostener el nivel.

Y cuando permitimos que este miedo nos invada no podremos seguir adelante.
Pero en realidad nuestros dos más grandes miedos son:

MIEDO DE QUE NO SEAMOS SUFICIENTES

MIEDO A NO SER AMADOS

Pero lo que debemos entender es que el MIEDO jamás se irá de nuestras vidas (te repito, lo necesitamos para sobrevivir) y debemos aprender a ir de la mano con él, que, aunque no se vaya, lo tomaremos de la mano, sin hacerle fuerza, sin luchar con él, solo entendiendo que será parte de nosotros siempre.

¿PERO CÓMO HAGO ESO?

Me gustaría decirte que hay una fórmula mágica, que hay una pastilla o un atajo, pero NO, la única manera de hacerlo es tomando decisiones y diciéndole a tu cerebro que tú eres quien manda, y que tienes el control y hacer lo que tienes que hacer con esa sensación y que si no le das la importancia, esta desaparecerá pronto.

Al miedo hay que cogerlo de la mano y llevarlo abrazado, pero lo más importante es que tengas la convicción que de verdad quieres ir por esos cambios en tu vida, que ya te cansaste de estos resultados que no te gustan y esto sucede porque no estás tomando decisiones correctas o te está dejando dominar del miedo.

Te digo por experiencia que cuando decides coger el miedo y saltar juntos a tragar agua e ir detrás de esa vida que quieres, empiezas a volverte tan poderos@ que ese miedo poco a poco irá perdiendo fuerza y solo lo usarás cuando realmente sea necesario (supervivencia)

CREE CIEGAMENTE EN TI.

CREE CIEGAMENTE QUE PODRÁS ALCANZAR TUS METAS.

CREE CIEGAMENTE QUE ERES SUFICIENTE.

CREE CIEGAMENTE QUE ERES CAPAZ.

Porque no son palabras de cajón, es la realidad, dentro de cada uno hay un poder tan fuerte e ilimitado que somos nosotros mismos quienes no lo creemos.

Gracias por llegar hasta aquí

Nos vemos en la próxima.